Calatayud. Naturaleza, historia y buena gastronomía

desde 77€ / persona

Calatayud es una pequeña ciudad aragonesa que tiene mucho que ofrecer. Su Muralla es uno de los elementos arqueológicos más importantes de Aragón y desde ella se puede admirar la belleza de la ciudad. Te proponemos alojarte en un pequeño edificio histórico del siglo XV de ambiente rústico con un gran patio interior empedrado y 34 habitaciones decoradas al más puro estilo aragonés.

No debemos pasar por alto la visita al “ Mesón de la Dolores “, el antiguo barrio de La Judería y la Colegiata de Santa María la Mayor (incluida en la lista Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO desde 2001) y Real Colegiata del Santo Sepulcro.

Si te apasiona el vino y la gastronomía, aquí gozarás del maridaje entre ambos y además podrás visitar sus famosas bodegas D.O.

Para desconectar de la rutina, piérdete por una de las rutas por los ríos Jiloca y Jalón o adéntrate en las sierras de Armantes y de Vicort. Sin olvidar una visita al Monasterio de Piedra, del que se dice que fue el primer lugar de Europa en el que se elaboró chocolate por primera vez.

Calatayud. Naturaleza, historia y buena gastronomía

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Calatayud es una pequeña ciudad aragonesa que tiene mucho que ofrecer. Su Muralla es uno de los elementos arqueológicos más importantes de Aragón y desde ella se puede admirar la belleza de la ciudad. Te proponemos alojarte en un pequeño edificio histórico del siglo XV de ambiente rústico con un gran patio interior empedrado y 34 habitaciones decoradas al más puro estilo aragonés.

No debemos pasar por alto la visita al “ Mesón de la Dolores “, el antiguo barrio de La Judería y la Colegiata de Santa María la Mayor (incluida en la lista Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO desde 2001) y Real Colegiata del Santo Sepulcro.

Si te apasiona el vino y la gastronomía, aquí gozarás del maridaje entre ambos y además podrás visitar sus famosas bodegas D.O.

Para desconectar de la rutina, piérdete por una de las rutas por los ríos Jiloca y Jalón o adéntrate en las sierras de Armantes y de Vicort. Sin olvidar una visita al Monasterio de Piedra, del que se dice que fue el primer lugar de Europa en el que se elaboró chocolate por primera vez.